Por: Roberto A. San Martín
Y yo estoy convencido de que la señora presidenta de la República Argentina (que ya no puede reelegirse, y ha dicho que no lo intentará) pudiera utilizar el tiempo que tendrá libre al salir del cargo, para escribir novelas de espionaje, intriga y conspiración.
Su carta (que escribe obligada por las protestas y la repercusión de la muerte del fiscal -con encuestas que ayer informaban que el setenta por ciento de los argentinos no creían "la historia del fiscal que se suicido con guantes, una pistola de otra persona, teniendo él dos armas propias- y que 'tuvo la delicadeza de después de muerto, quitarse los guantes para no dejar rastro de pólvora en sus manos' la llevaron a escribir una carta donde admite que "Nisman no se suicidó" y eslabona una linea de sucesos que demuestra que Nisman y su grupo de investigación "fueron víctimas de una conspiración dirigida contra ella".
O sea, el gobierno de KK (lea:Cristina Kirchner, sin el Fernández) no tiene "nada que ver con la muerte del fiscal que iba a mostrar en Diputados las pruebas documentales que la implicaban a ella, a su canciller, junto a otros miembros del gobierno en la conspiración que ha mantenido oculto por 20 años a los atacantes de la Embajada, y de la AMiA" y afirma que a Nisman (con todo su eficiente equipo) lo "usaron como 'tonto' -no quise escribir estúpidos que es lo que da a entender ella en su última carta publicada en su Twitter- para que la
muerte del fiscal (su asesinato, porque ella admite que no fue suicidio), fue "orquestada por sus enemigos para inculparla a ella del asesinato".
En diversos párrafos elabora toda una trama que incluye traición, espionaje, conspiración y un asesinato a la altura de un filme de Hollywood, que rompería los récords actuales de taquilla y quizás ganaría un Oscar como película extranjera, donde sus enemigos la inculpan.
Esta es pues mi conclusión y consejo leal y desinteresado, dedíquese a escribir "trillers para Hollywood" ganaría más que la miseria de $10,000 dólares que hoy se paga usted por ser presidenta.
Píenselo en serio, puede que muy pocos le crean la historia elaborada en su última carta, pero como trama de una película sería todo un éxito. Es más renuncie hoy a la presidencia donde pierde esfuerzos mentales, dinero, salud y ponga a la venta "su última carta"
como la perfecta sinopsis de un filme. A lo mejor ganaría "dinero legal por su trabajo intelectual" y saldría de toda esa recua de bandidos que hoy la rodean porque usted y su difunto esposo los han hecho multimillonarios y que, cuando usted deje de ser UNA FIGURA OFICIAL, la traicionarán y escribirán libros o guiones de cine contando "sus versiones de como usted y su esposo fabricaron su fortuna -con la trama de su paso por Santa Fe incluida.
Usted es una escritora con una imaginación capaz de crear dramas muy fuertes y todo lo vivido puede servirle para escribir novelas y películas.
Renuncie. Sepárese del grupo de chorros que la rodean, váyase a Suiza (y con la belleza de los bosques nevados como fondo) dedíquese a escribir y nadie nunca más la llamará mentirosa o farsante, porque actuará igual que hoy inventándose tramas como escritora con las que "cobrará por un trabajo limpio y legal" muchísimo más de los $10,000 que ahora se paga como presidenta con tanta gente en contra, esperando la traición de sus más cercanos colaboradores y podrá "disfrutar dejando volar su imaginación para inventar historias que nadie creerá (tampoco hoy lo creen), pero todos disfrutarán muchísimo viéndolas en pantalla.
Fraternalmente,
Roberto A. San Martín
Y yo estoy convencido de que la señora presidenta de la República Argentina (que ya no puede reelegirse, y ha dicho que no lo intentará) pudiera utilizar el tiempo que tendrá libre al salir del cargo, para escribir novelas de espionaje, intriga y conspiración.
Su carta (que escribe obligada por las protestas y la repercusión de la muerte del fiscal -con encuestas que ayer informaban que el setenta por ciento de los argentinos no creían "la historia del fiscal que se suicido con guantes, una pistola de otra persona, teniendo él dos armas propias- y que 'tuvo la delicadeza de después de muerto, quitarse los guantes para no dejar rastro de pólvora en sus manos' la llevaron a escribir una carta donde admite que "Nisman no se suicidó" y eslabona una linea de sucesos que demuestra que Nisman y su grupo de investigación "fueron víctimas de una conspiración dirigida contra ella".
O sea, el gobierno de KK (lea:Cristina Kirchner, sin el Fernández) no tiene "nada que ver con la muerte del fiscal que iba a mostrar en Diputados las pruebas documentales que la implicaban a ella, a su canciller, junto a otros miembros del gobierno en la conspiración que ha mantenido oculto por 20 años a los atacantes de la Embajada, y de la AMiA" y afirma que a Nisman (con todo su eficiente equipo) lo "usaron como 'tonto' -no quise escribir estúpidos que es lo que da a entender ella en su última carta publicada en su Twitter- para que la
muerte del fiscal (su asesinato, porque ella admite que no fue suicidio), fue "orquestada por sus enemigos para inculparla a ella del asesinato".
En diversos párrafos elabora toda una trama que incluye traición, espionaje, conspiración y un asesinato a la altura de un filme de Hollywood, que rompería los récords actuales de taquilla y quizás ganaría un Oscar como película extranjera, donde sus enemigos la inculpan.
Esta es pues mi conclusión y consejo leal y desinteresado, dedíquese a escribir "trillers para Hollywood" ganaría más que la miseria de $10,000 dólares que hoy se paga usted por ser presidenta.
Píenselo en serio, puede que muy pocos le crean la historia elaborada en su última carta, pero como trama de una película sería todo un éxito. Es más renuncie hoy a la presidencia donde pierde esfuerzos mentales, dinero, salud y ponga a la venta "su última carta"
como la perfecta sinopsis de un filme. A lo mejor ganaría "dinero legal por su trabajo intelectual" y saldría de toda esa recua de bandidos que hoy la rodean porque usted y su difunto esposo los han hecho multimillonarios y que, cuando usted deje de ser UNA FIGURA OFICIAL, la traicionarán y escribirán libros o guiones de cine contando "sus versiones de como usted y su esposo fabricaron su fortuna -con la trama de su paso por Santa Fe incluida.
Usted es una escritora con una imaginación capaz de crear dramas muy fuertes y todo lo vivido puede servirle para escribir novelas y películas.
Renuncie. Sepárese del grupo de chorros que la rodean, váyase a Suiza (y con la belleza de los bosques nevados como fondo) dedíquese a escribir y nadie nunca más la llamará mentirosa o farsante, porque actuará igual que hoy inventándose tramas como escritora con las que "cobrará por un trabajo limpio y legal" muchísimo más de los $10,000 que ahora se paga como presidenta con tanta gente en contra, esperando la traición de sus más cercanos colaboradores y podrá "disfrutar dejando volar su imaginación para inventar historias que nadie creerá (tampoco hoy lo creen), pero todos disfrutarán muchísimo viéndolas en pantalla.
Fraternalmente,
Roberto A. San Martín
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Fuente: http://www.clarin.com/politica/Nisman-AMIA-muerte_del_fiscal_Alberto_Nisman_0_1289871134.html
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